La decoración era súper moderna y original, con frases divertidas por todas partes. Además, había espacios comunes muy cómodos donde podíamos trabajar o jugar a juegos con nuestros amigos. Y lo mejor de todo, teníamos café y frutas ilimitadas en la zona común, siempre listos para disfrutar. ¡Fue genial tener ese extra de energía para nuestras aventuras en Maastricht!

Lo único que podríamos pedir es que hubiera una zona de fiesta para jóvenes animados como nosotros. ¡Nos encantaría tener un lugar en el hotel donde poder divertirnos y bailar hasta altas horas de la noche!

Una gran experiencia en Dutch en Maastricht. Las habitaciones son muy cómodas y espaciosas, con minibar incluido. Me encantó que ofrecieran un desayuno en bolsa que dejaban en la puerta de nuestra habitación todas las mañanas. disfrutamos de la zona común, donde podíamos disfrutar de café, frutas y juegos de mesa. Sin duda, volveremos a este fantástico hotel. Recomendado al 100%.

La atención es genial, todos muy simpáticos. El hotel está en cada detalle, con espacios comunes muy cómodos. El desayuno te lo dejan colgado en la habitación, con agua y frutas para consumir.

Me sentí muy cómodo, no tengo ninguna pega.

¡Mi estancia en este hotel fue genial! ¡El personal fue encantador y la ubicación era perfecta! La habitación estaba muy limpia y era cómoda, con una nevera que estaba llena de bebidas gratuitas. Además, el desayuno llegaba a la puerta de la habitación en una bolsa con fruta fresca, zumo de naranja y deliciosos bollos. ¡Muy completo!

Un hotel moderno, me ha gustado su ubicación bonita y perfecta.

Ubicación: el hotel estaba en las proximidades de buenas tiendas y de muchos buenos restaurantes y del jardín. Visité Cinema Café para degustar algunos postres, sobre todo cuando llovía, personalmente lo aconsejo. La habitación era funcional y moderna, con un buen espacio, me encantó. El café, el salón y el té gratis fueron un puntazo.

Una habitación muy bien amueblada y de buen tamaño, nuestra estancia ha sido divertida.

Una ubicación de primera y tranquila justo al lado de del centro histórico y de las atracciones turísticas y de encantadores restaurantes, un registro fácil. Además, fui al lago, que está a 5 minutos a pie. Las camas eran geniales, y había un espacio de almacenamiento, café y un salón en la habitación. Tener una ducha separada en el baño grande fue súper impresionante.

Había estado deseando visitar la Basílica de San Servatius y elegí el hotel Dutch solo por eso, ¡pero me sorprendí gratamente con el check-out el día de mi salida! Además, disfruté mucho de un desayuno completo servido en la mesa, que incluía clásicos como Eggs Benedict y American Pancakes recién hechos a pedido. La relación calidad-precio también fue muy buena, con un extenso menú y muchas opciones para elegir. Además, me encantó recibir una Bolsa de Desayuno en la habitación con un pastelito diario y jugo de naranja fresco. Este café también ofrece deliciosos desayunos y almuerzos.

Estacionamiento público cerca de la estación de tren.

Me encantó la ubicación del hotel, muy cerca de la estación de tren y de la lanzadera de autobuses. Además, está a poca distancia del palacio de congresos. Poder alquilar una ebike en el propio hotel fue muy conveniente. había buenas opciones para desayunar, almorzar o cenar cerca del hotel. La decoración vintage con toques de fitness y las frases divertidas por todas partes le daban un ambiente único. La estancia fue perfecta, el detalle de la bolsa de desayuno en la habitación fue genial, y en la zona común siempre había café y frutas disponibles. Además, al menos una recepcionista hablaba un excelente castellano. Sin duda, una experiencia imperdible en la ciudad.

Nada de verdad. 😊

Una ubicación estupenda muy cerca de la estación de tren y vistas agradables. Tenía una habitación excelente e increíble con café, un salón y té gratis. El personal del hotel es fantástico, el desayuno gratis y delicioso.

Desayuno extenso con opciones clásicas como los Huevos Benedictinos y Panqueques Americanos recién preparados a pedido. Una mañana, mientras disfrutaba de mi delicioso desayuno, me sentí como si estuviera en una película, como si hubiera entrado en el mundo de las deliciosas delicias. Los huevos benedictinos eran tan suaves y cremosos que parecían bailar en mi boca, mientras que los panqueques americanos eran tan esponjosos y abundantes que me sentí como si estuviera abrazando una nube. ¡Definitivamente el desayuno perfecto para comenzar el día!

Sin café descafeinado.

Un personal extremadamente amable, servicios agradables, incluida un montón de comida buena. Dormitorio espacioso, baño grande.

Todo estuvo perfecto.

Ubicación excelente. Personal encantador.Ambiente y detalles modernos.Desayuno atípico pero práctico.

Nada de nada.

La ubicación, cerca de Wyck fue de primera y tranquila. Había boutiques y una tienda justo a la salida del hotel. La habitación era muy bien amueblada y de buen tamaño y tenía un espacio de almacenamiento, café y un salón. Cama genial con almohadas hipoalergénicas.

Ubicación muy cerca de encantadores restaurantes, también de los canales. Cené cerca del hotel, en van Wijck.

La habitación limpia y cómoda

Desayuno variado y práctico. Bebidas y snacks gratuitos.Ubicación conveniente cerca de la estación de tren y autobús

De verdad no hay nada que no me haya gustado.